Costa Rica establece este permiso laboral por medio de Ley. Ahora, queda en la voluntad de cada padre tomar esos días no como unas vacaciones, sino como un apoyo a la mujer que recién dio a luz.
Por Paola Barrera – Ticas Poderosas
El rol del padre está evolucionando con el paso del tiempo, tanto es así que ahora cuentan con una licencia por paternidad, la cual es creada para brindar apoyo a las parejas en los momentos de adaptación a la nueva vida.
Costa Rica marca un hito en materia laboral. Desde el pasado 3 de junio, el país brinda una serie de beneficios legales a los recientes padres. Por medio de la reforma a los artículos 70, 94, 94 bis, 95, 96, 97 y 100 del Código de Trabajo se reconoce la llamada licencia de paternidad, además de una serie de derechos dirigidos a la protección de la mujer embarazada o en período de lactancia.
No se trata de vacaciones para el padre, sino de dos días libres semanales de pago obligatorio durante las primeras cuatro semanas de vida del recién nacido, para un total de ocho días. ¿El objetivo? Compartir las responsabilidades del cuidado del menor.
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Aunado a lo anterior, la reforma otorga, en caso de que la madre fallezca, la posibilidad de que sea el padre quien tenga derecho a la licencia que hubiese gozado la progenitora, siempre que ésta se comprometa a hacerse cargo de la persona recién nacida. En caso contrario, por disposición de ley, la licencia especial sería otorgada a la persona trabajadora que demuestre que se hará cargo de la persona menor de edad.
Esta reforma no es única de Costa Rica, en países como Islandia y Finlandia la llamada «cuota para el padre» equivale a más de un mes de remuneración. Se suman a ellos Reino Unido, España, Polonia, Venezuela, Nueva Zelanda y Australia, según datos de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
Cabe resaltar que también hay padres que piden sus vacaciones para estar con sus bebés y parejas en este momento de la vida.
¿Qué beneficios se obtiene con la licencia por paternidad?
Maripaz Sancho Miranda, profesora de Derecho de Universidad Fidélitas, enumera una serie de beneficios para el núcleo familiar.
-Una valoración del principio del interés superior del menor para relacionarse con ambos padres.
-Un mayor involucramiento del padre en el desarrollo de los hijos, no solo durante el embarazo, sino también durante el parto y el postparto para promover la conexión del progenitor con el hijo.
-Un fortalecimiento de los lazos familiares, en relación con la parte afectiva, física, conductual y biológica de los niños y, por tanto, de su autoestima.
-Una mayor participación en el apoyo postnatal, en beneficio de la relación de pareja y la atención a los otros hijos.
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Además, en el Reino Unido, se ha identificado que el hecho de que los padres se tomen sus permisos por paternidad es algo que está fuertemente asociado con el bienestar de las madres tres meses después de dar a luz.
Asimismo, investigaciones del Instituto de Liderazgo y Gerencia del Reino Unido (ILM, por sus siglas en inglés) subrayan que incentivar la distribución del permiso paternal y las responsabilidades entre madres y padres es un paso crucial para permitir que más mujeres asciendan a puestos directivos mejor remunerados.
Otros beneficios para las costarricenses
Por otro lado, interesa destacar que la reforma se extiende al tema de la adopción de menores, al incorporar la posibilidad -en adopciones compartidas- de que los padres dividan, bajo común acuerdo, la licencia especial de tres meses a partir de que reciben al menor.
Adicionalmente, la ley cubre a las trabajadoras con un fuero particular que impide al empleador despedir a quienes estén gozando de alguna de las licencias. En caso de despido, la trabajadora queda facultada para gestionar una demanda solicitando su reinstalación o dando por terminada la relación laboral con responsabilidad patronal, incluyendo ocho meses de salario, el subsidio de preparto y posparto y los daños y perjuicios, en caso de que se encuentre en periodo de lactancia
