La de Rojo*

En este país es poco común ver a personas rubias de nacimiento, pero hay que admitir que hemos sido bastantes las que metemos nuestros pelos a las palanganas de agua oxigenada en los salones de belleza para obtener este color claro platinado a toda costa.

Los medios se han encargado de vendernos la idea de que las rubias son tontas, fáciles y con poco tema de conversación, a través de los personajes de series, películas y cuanto anuncio hay.

Estoy segura de que además Marilyn Monroe contribuyó enormemente a que se difundiera esa filosofía; primero que nada no era rubia y segundo no tenía un pelo de tonta, más bien era vivísima, hasta escribía poemas y agarraba a todos de “majes” para obtener lo que quería.

La misma sociedad se ha encargado de extender este mito a las que son o fuimos farmachas en algún momento, haciéndonos cargar con el mismo estigma que si fuéramos rubias naturales.

¿Qué tan ilógico puede ser asociar la inteligencia a un color de pelo? Ahora han salido mil estudios que afirman que al contrario de lo que se piensa, las rubias son más capaces y otras tonteras.

Si bien tener el pelo más claro, por lo menos en este país, conlleva a un exceso de atención violento y algunos beneficios extras, porque todo el mundo quiere atender a “la machita”, nada tiene que ver con el IQ ni capacidades.

La decisión del color de cabello no debería venir acompañado de este peso enorme, es solo un tono más. Que las rubias y las farmachas son tontas ya pasó de moda, ahora son presidentas de compañías, emprendedoras, líderes de opinión, madres y un ser humano como cualquier otro.

Deberíamos dejar de poner en duda la inteligencia de las personas por estigmas tan tontos y sí hacerlo con los comportamientos o comentarios fuera de lugar de gente que sin importar el color de pelo o piel es realmente estúpida, pero se camufla mientras todos están ocupados minimizando a las machas.

*Amante del zumba, el reggaeton, el karaoke y otros demonios. Mi lugar la playa, mi color por supuesto el rojo, mi debilidad los chocolates, mi canción favorita November Rain y mi inspiración; la calle.

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