Ticas rompen moldes con el fútbol americano

Del 12 al 17 de marzo Costa Rica tendrá representación en el primer torneo Americas Women’s Bowl 2020 que se disputará en Honduras.

Por: Fiorella Montoya

No es un deporte tradicional, incluso algunos no saben que se practica en nuestro país pero sí tiene entre sus filas mujeres valientes, sin temor y dispuestas a entregarlo todo en el terreno de juego.  Son el Gridiron Women’s All Stars, el combinado femenino de fútbol americano en nuestro país.

“Son mujeres empoderadas que saben que pueden lograr todo lo que se proponen. Están rompiendo estereotipos y paradigmas”, así define Carlos Ávila al equipo, el entrenador a cargo.

Mujeres de entre 12 y 40 años son parte de este deporte en Costa Rica, y sobre todo de este combinado patrio que poco a poco aumenta sus seguidoras a nivel nacional.

“Estar en las All Stars ha sido una experiencia súper chiva, porque que te escojan entre tantas chicas para conformar un grupo que va a representar al país, la verdad ha sido un orgullo. Todas nos esforzamos demasiado, es muy bonito porque compartís con gente con vidas muy diferentes”, mencionó Laura Hernández, una de las jugadoras.

Esto porque, en el mes de marzo disputarán el Americas Women´s Bowl donde se enfrentarán a los equipos femeninos de Estados Unidos, México, Chile y el equipo anfitrión Honduras.

“Ser seleccionada para mí ha sido un cambio grande. Desde mi forma de verme como persona, mi salud, mi mentalidad y ahora verme tan cerca de algo tan grande como lo es este centroamericano no tiene explicación. Es algo único que una puede llegar a sentir, la motivación de aprender cada día más”, dijo Ashly Mora, competidora de 19 años.

La liga nacional de Fútbol Americano Femenino nació hace dos años, y hoy es conformada por los equipos de Goddesses (San José), Valkirias (Pérez Zeledón) y las actuales campeonas Bulldogs Flames (San José). Equipos entrenados por Carlos Ávila, Danny Monney y Martín Gutiérrez respectivamente.

Sin embargo, el deporte aún no está inscrito como una disciplina oficial ante el ente rector el Instituto Costarricense del Deporte y la Recreación (ICODER), pero se encuentran en proceso de que se logre y pronto sean también la Selección Nacional de Fútbol Americano Femenino.

A pesar de los esfuerzos y la entrega de las jugadoras, el sacrificio ha ido más allá, esto por amor al deporte.

La milla extra…

Como sucede en muchas ocasiones en nuestro país, mantenerse practicando un deporte no tradicional resulta difícil por la falta de apoyo que reciben.

“Lamentablemente no recibimos tanto apoyo pero sí hay algunas empresas que nos han tendido la mano y nos han ayudado. Sin embargo, es un deporte muy caro en especial si hay que salir del país. Nos gustaría recibir más ayuda ya que sabemos que las mujeres del fútbol femenino van por buen camino y harán historia; así como otras atletas que han dejado a Costa Rica en alto”, mencionó el seleccionador.

Además, para la competencia internacional las jugadoras debieron sacar de su bolsillo para poder viajar.

“Acá a los deportes femeninos se apoyan menos, y eso es algo que nosotras queremos cambiar y romper esas barreras a pesar de que nos toca cubrir los gastos de todo, lo hacemos porque nos gusta, amamos el deporte y esperamos que a las próximas generaciones no les toque tan difícil”, agregó Hernández.

Por otra parte, Mora es una de las jugadoras que debe desplazarse para entrenar, en su caso desde Pérez Zeledón, y de igual manera lo hace por el amor a este deporte. “Una misma tiene que motivarse, y motivar a las personas. Es una manera sana de desahogarse, dejar problemas, dolores y preocupaciones en la cancha”, mencionó.

Muchas de ellas iniciaron viendo la NFL, o por curiosidad en un deporte que se convirtió en pasión y ahora las llevará a atravesar fronteras; en conjunto con un cuerpo técnico que las motiva cada vez más a alcanzar sus sueños.

“Nací de una mujer y también tengo hijas. Quiero que mis hijas y otras mujeres crezcan con opciones y libertad de practicar este y cualquier otro deporte que gusten y que no dejen que nadie les haga creer que son el sexo débil. Pueden lograr todo lo que se proponen”, finalizó Áviles.