Son actitudes y frases frecuentes en el lenguaje de hombres y mujeres, que menosprecian y rebajan la posición de igualdad femenina.

Por: Fiorella Montoya

¿Ya aprendió a cocinar?, si es niña ropa rosada, si es niño, azul. El fútbol es para hombres, te celo porque te amo, detrás de un gran hombre hay una gran mujer.

¿Los ha escuchado, vivido o incluso mencionado? Posiblemente todo desembarque en que su respuesta es sí, porque se ha generado una cultura a nivel global de lo que día a día viven las mujeres, comentarios de todo tipo menoscabando su integridad.

“Es un término que se utiliza para los comportamientos, para las interacciones uno a uno entre las personas y que responden a una visión más general que es el machismo, son a veces comportamientos imperceptibles, es decir no es necesariamente un golpe o agresión sexual. Son mecanismos de control, de bajada de piso”, explicó Monserrat Sagot, socióloga.

Algunos términos más comunes que otros, tanto así que sería imposible enumerar los más habituales; sin embargo hay frases que calan más que otras y es por eso que algunas mujeres de las que no revelaremos el nombre, nos comentaron algunas comunes en su ambiente de trabajo o en su diario vivir.

“Mándenla a ella porque no tiene hijos…”

A quien mencionó esa frase la llamaremos María, ella supera los 30 años y se desempeña como policía, repetidamente ha escuchado esa frase, su respuesta es enojo e impotencia ante estos comportamientos.

“El patriarcado que ha existido por años, debe cambiar y darnos más oportunidades, hasta en la inclusión de cursos policiales. El año pasado fui a un curso donde había 30 hombres y solo yo de mujer, en lugar de hacer un grupo de 15 hombres y 15 mujeres, siempre el 90% lo cubre el porcentaje masculino”.

“El fútbol es para hombres…”

Un micromachismo históricamente utilizado, aún en el 2020. A pesar de que se realizan copas mundiales, torneos nacionales y existe la profesionalización del fútbol femenino en muchos países, esta frase parece aún perseguir a las mujeres que actualmente se desempeñan en esa profesión.

“Cuando una escucha esta frase siente enojo e impotencia, porque sabía que eso no era cierto y yo al igual que un hombre tengo el derecho y las mismas capacidades de practicar ese deporte”, dijo ‘Camila’ de 20 años quien muchas veces escuchó esa frase hasta de su familia.

Infografía: Fiorella Montoya

“¿Para qué va a estudiar si su lugar es la casa?”

Existen varios términos relacionados a esta frase: el hombre es de la calle, la mujer es de la casa, su deber es plancharle, lavarle y cocinarle, tiene que complacerlo para que no se enoje, etc.

“Con esas frases me sentí menos que el hombre, se siente una como si fuera un objeto y en ocasiones tuve temor. Se siente una sin valor, inferior y sin derechos”, expresó ‘Elena’, quien es ama de casa y a sus 44 años tiene como propósito finalizar el colegio.

“Deberías ser un poco más femenina” 

Sofía, de 21 años considera que esta frase es absurda pero la escuchó durante mucho tiempo.

“Que si no me maquillo, no ando en tacones, no llevo mi cabello aplanchado y reluciente no soy femenina. Nos reprimen, nos lastiman y nos hacen desconfiar de nosotras mismas, crecimos con eso y poco a poco debemos ir luchando por confiar en nosotras y saber que nadie más puede calificarme de una u otra manera, solo yo”, dijo.

Podría continuar redactando, entrevistando y hablando con varias mujeres que cada una de ellas podrá decir al menos una frase que le haya sentido inferior. Además, la conducta machista en los hombres incluso puede trasladarse y crear otro tipo de comportamiento en las mujeres.

“Las hace sentirse, inadecuadas, insultadas, disminuidas, va limando su autoestima y hace que más fácilmente puedan caer bajo el control de esos hombres. Las va poniendo en una situación de desventaja emotiva, emocional  y por lo tanto se vuelven muy vulnerables, muchas veces haciendo cosas para complacer para no sentirse mal y caen en trampas en relaciones de control y relaciones que no son nada sanas para ellas”, añadió Sagot.

Aparte de los micromachismos, la violencia hacia la mujer ha sido constante de varias maneras; según los datos del Sistema de Emergencias 911 en 2019 se atendieron 785 denuncias por acoso callejero, 2.647 incidentes por delitos sexuales, 109.008 incidentes por violencia en proceso y 725 víctimas de violación. 

Día a día se lucha con las frases y comportamientos que en muchas ocasiones van más allá, pero la decisión de muchas mujeres poderosas han demostrado que el valor nunca se define por una frase y que este tipo de luchas pueden generar gran impacto.